28 septiembre, 2015
En mis 9 años de actividad en Diálogo en la Oscuridad, la empatía es una de las palabras que más he escuchado cuando se habla del impacto que esta experiencia provoca en nuestros visitantes.
¿Pero qué es la empatía y para qué me sirve?
“Ponerse en los zapatos del otro”. Esta es la definición de empatía que escuchamos con más frecuencia, incluso he tenido la oportunidad de escuchar esta misma definición en otros países y en diversos idiomas.
Hoy hablo desde mi perspectiva personal, y desde la perspectiva del coaching ontológico, disciplina que ejerzo y que me ha ayudado mucho para comprender y actuar desde mi realidad de persona ciega.
Ponerse en los zapatos del otro no existe, es imposible. Mi vida, la forma en que yo experimento mi realidad, no es un objeto, no es un zapato que pueda prestarte para que tú sientas cómo es estar en él. Mi experiencia de la realidad es una vivencia intransferible, debido a que soy un ser humano irrepetible, a que ni tú ni nadie más han vivido la historia de mi vida como yo lo he hecho, nadie tiene exactamente el mismo contexto social y económico que me rodea, y por si fuera poco, mi estructura física, psicológica, biológica y química no es exactamente igual a la de nadie más.
Nuestras vidas no son zapatos que podemos ir prestando a los demás para que sepan qué se siente ser nosotros, no cosifiquemos; la vida que experimentamos es una experiencia subjetiva e intransferible. Ponerme en los zapatos del otro es imposible. Todos los seres humanos tenemos pies distintos, insistiendo en la metáfora de los zapatos, por lo que, en caso de que tu zapato fuera de la misma talla que el mío, seguramente lo experimentaría de forma distinta debido a la anatomía única de mi pie.
¿Entonces qué sí es la empatía?
La empatía es entender las necesidades del otro, o hacer el mayor de los esfuerzos por entender las necesidades del otro.
La diferencia radica en que, si yo creo ponerme en los zapatos del otro, estoy asumiendo una actitud definitiva, de sabelotodo, al comprender perfectamente lo que una persona siente. Ello no existe, pues como mencioné antes, la naturaleza no me permite transferir mi experiencia personal de la vida. Lo que sí puedo hacer para ejercer la empatía es:
1. Ejercer la humildad: es decir, renunciar a la idea de que sé todo, de que comprendo cómo se siente la gente
2. Ejercer un genuino interés por los demás: comprender y experimentar los beneficios de entender y contribuir con los demás
3. Estar dispuesto a aprender: hacer preguntas y ser curioso para descubrir más sobre la vida del otro, con la meta de aprender de esa persona y ser de utilidad, y no de ponerme en una postura superior (sabelotodo).
4. Bajarle al juzgómetro: escuché la palabra “juzgómetro” de una persona en una cena en total oscuridad la semana pasada, y con su permiso y con respeto hacia ella, la utilizo. Juzgar a una persona es un obstáculo para construir una relación de crecimiento; al evitar juzgar, permito que la persona se exprese tal cual y me permite a mi vez un entendimiento más genuino.
5. Respeto: ser empático, o entender las necesidades del otro, implica también no transgredir las áreas sensibles de la persona y mostrar un respecto inquebrantable por ella.
¿Para qué ser empático?
¿Te gusta sentirte comprendido? ¿Escuchado? ¿Apoyado? ¿Acompañado? ¿Te gusta contar con relaciones sólidas con tus amigos, familia, pareja y compañeros? ¿Te gusta compartir tanto los momentos alegres como los momentos difíciles?
Podría formular algunas preguntas más, pero si alguna de las respuestas hasta ahora es sí, la empatía te será de ayuda. Recuerda que no podemos recibir lo que no damos. La empatía nos ayuda a construir relaciones sanas, genuinas, duraderas y de apoyo con los demás.
La globalización comenzó desde que comenzó el universo, pero nunca se trató de una interconexión económica, sino que nuestro mundo y nosotros como seres humanos funcionamos de una forma interdependiente, y si comprendemos eso, veremos el valor de la empatía en su máximo esplendor.
¿Y tú qué haces para ser más empático?
Gracias por leer. Excelente arranque de semana a todos.
Coach-Pepe Macías